Dinamarca es junto a Reino Unido los únicos países de Europa que entran en la lista de los diez puentes colgantes más largos del mundo. El
Puente del Gran Belt, en Dinamarca, conocido como el Puente de Oriente tiene una
longitud de 1,624 km y ha sido hasta la fecha el mayor proyecto de construcción en la historia del país.

Diseñado por un estudio de arquitectura danés, el puente que conecta las islas danesas de Selandia y Fionia, fue abierto para los
vehículos y el transporte ferroviario -con doble vía- en julio de 1998 tras superar dificultades con Finlandia que alegaba que el puente dañaría el tráfico marítimo en el estrecho.
El puente reemplaza el servicio de transbordador que había sido el principal medio de cruce del estrecho de Gran Belt durante más de 100 años. Su construcción y mantenimiento son financiados por los peajes a los vehículos y trenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario